Te veo, te agarro, te saco las capas que cubren tu cuerpo.
Te huelo, te recorro con mis manos y ya empiezo a sentirlo.
De a poco van cayendo lagrimas sobre mi rostro, no puedo controlarlo. Cada encuentro con vos termina de la misma manera. Es inevitable, el ardor se hace presente ni bien mis dedos sienten tu carne, tu aroma penetra en lo mas profundo de mi ser, me gusta pero a la vez me enceguece.
Así comienza nuestra lucha, vos me haces llorar pero yo te vuelvo a buscar una y otra vez, corro al baño, me mojo el rostro, mis ojos se hinchan, mis manos impregnadas en tu olor, te alejo pero aun así el ardor sigue presente.
Con todas mis fuerzas concluyo este encuentro, prendo el fuego, pongo la sartén, el aceite y te hecho al fuego.
Cebolla hija de puta como me haces llorar! pero se que te voy a volver a buscar porque me gustas!
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